Hago los deberes, que como dice negroscuro, tenía pendientes.
Esta semana, he echado una partida al juego nuevo de Martin Wallace, London. Tengo que decir que el juego en general está bien, pero que tampoco «me ha matado».
El juego está muy bien equilibrado y penalizará a los jugadores que no sean eficientes, ya sea gastando mucho dinero (pidiendo prestamos) o construyendo más de lo que deberían.
Sobre el tema, la reconstrucción del Londres después del Gran Incendio de Londres del año 1666, no puede estar más «de más». El mapa es como si no estuviera y se ha inventado una pequeña regla para dar 2 puntos más a cada localización, casi por hacer algo.
Jugamos a 4 jugadores y se me hizo largo para lo que ofrece el juego. Prefiero una partida a San Juan o San Petersburg, por tratar de encontrar algún juego similar aunque eso sí algo menos profundos que el London este. En cualquier caso, volveré a jugar cuando se presente y trataré de hacerlo mejor, que la verdad por desconociemiento de la distrubción de las cartas en los difirentes mazos, no se me dio demasiado bien.
Una buena alternativa si se desea un juego de cartas más o menos complejo, con gestión de mano y posibilidad de combos.
*** Buena
Y el pasado Miércoles para cerrar la sesión en Clandestino, echamos un Rattus con personajes nuevo de la expansión Pied Pipper.
Tengo que decir que la partida fue divertidísima. La expansión añade un montón de personajes con unas características muy peculiares…
Jugamos a 3 jugadores y Zoro decidió tirar del Alcalde (que pone 1 cubo en todas las provincias donde se tenga la mayoría) petando la partida en 2-3 rondas, en parte por mi error de utilizar al Obispo (no pueden entrar ratas donde esten) en las regiones de al lado y dejando prácticamente sin peste a todo el este de Europa. La peste había empezado en España para que os hagáis una idea…
Javi por su parte optó por el Emperador y se puso un muro por cada lado de acceso a la zona escandinava aislándose completamente del resto de Europa. No le fue mal del todo, quedando segundo, pero muy lejos del ganador que salvo 18 de 20 cubos (espectacular).
Hubo otra serie de jugadas maestras combinadas, con el Flautista (Pied Pipper) que se lleva un cubo y las ratas a una región adyacente (como en el cuento) o uno de los soldados nuevos que puede elegir el orden en que se ejecutan las ratas en una región.
Lo dicho, un juego lleno de azar que no asegura que gane el que mejor juegue (pero si en un gran porcentaje), pero que al ser corto lo justifica con la gran diversión que genera por las diferentes posibilidades para utilizar los roles y su interacción entre ellos.
**** Muy buena